Saltar al contenido

Vida

22/03/2010

Durante mucho tiempo se me había parecido que estaba a punto de comenzar la vida real, pero siempre había un obstáculo en el camino, algo que resolver primero, algún asunto sin terminar, un deuda que pagar, y luego la vida comenzaría, al fin me di cuenta que estos obstáculos eran mi vida.

|  Howland, Bette

Problemas que acarrea la ansiedad.

22/03/2010

¿Pones escusas para no hacer las cosas? ¿Temes hablar en público? créeme no es tu culpa.

Existen muchos medios que nos inmovilizan, y muchas veces lo hacen sin que sepamos qué es lo que realmente nos inmoviliza, esa tarea o actividad que queremos hacer pero que siempre la postergamos, colocamos una escusa que nos la creemos realmente, pensamos que es bueno el motivo por la cual estamos postergando la actividad, pero en un corto lapso de tiempo nos termina afectando.

Por ejemplo, yo pinto carteles publicitarios en comercios, y un día noté que siempre ponía una escusa para no ir, pero sin darme cuenta, o sea, siempre encontraba un motivo para postergar esa actividad y luego venían los problemas, son pequeñas escusas que colocamos sin darnos cuenta que no tienen mucho sentido en sí.

las más comunes en todos los casos pueden ser.

  • Está a punto de llover
  • Hace demasiado frío o calor
  • Ya no me da el tiempo para hacerlo hoy, lo hago mañana.
  • Me falta determinada herramienta o cosa para realizar esa tarea.

Esto es solo un corto ejemplo para que vean a que me refiero, cada cual tiene una “escusa” diferente según las actividades que realice.

Creo que todo lo anterior esta muy ligado a la ansiedad, la ansiedad lo definiría como el “miedo a no saber qué es lo que viene” la ansiedad es eso que mucho le llaman “nerviosismo” y que aparece justo antes de por ejemplo hablar en público, o realizar alguna tarea con cierto grado de responsabilidad y que una vez que se lleva a cabo desaparece, la ansiedad tiene ciertos grados, algunos más fuertes que otros, pero me animo a decir que inconscientemente nos obliga a ir postergando las actividades que de alguna manera tienen cierta importancia para nosotros, en mi caso por ejemplo mis carteles deben quedar perfectos, requieren de muchas medidas y de mucha precisión en sus trazos, tiene que quedar proporcionado y muchas veces son gigantografías y hay que trabajar en un espacio amplio y me da un poco de ansiedad el comenzarlos y creo que es por eso que mi inconsciente me juega una mala pasada y busca escusas para que yo pueda postergar ese tipo de actividad.

Cómo combatir la ansiedad.

Esa incomodidad que muchas veces se presenta como un “vértigo” desaparece inmediatamente después que comenzamos la actividad por la cual estábamos ansiosos, de esta manera para combatirla, debemos tomar la acción y así comenzaremos a perder esos miedos, a mi me ha funcionado, ya casi que no la experimento y he dejado de colocar escusas para postergar las cosas, aunque muchas veces me descubro colocando una escusa, pero inmediatamente “me corrijo” y tomo la acción.

¿Y a tu has experimentado la ansiedad? ¿qué has hecho para evitarla? siéntete libre de dejar tu comentario.

Debo plantear objetivos, metas.

21/03/2010

A corto, mediano y largo plazo, avanzar, ir hacia…

Objetivos a corto plazo Lo primero que vamos hacer, es plantearnos objetivos a corto plazo, conseguir un cuaderno chico o una agenda de las baratas para comenzar a escribir y “ver”, visualizar de alguna manera nuestros objetivos y lo más importante, colocarles una fecha, a modo de límite, verás como inconscientemente te mueves hacia ese objetivo. Algunos ejemplos serían

  • ganar “x” cantidad de dinero esta semana (tiene que ser un número razonable para ti)
  • caerle más simpáticos o hacer pequeñas acciones que sean reconocidas por tus compañeros de trabajo o por tu jefe
  • levantarse un poco más temprano, en fin…

hay miles de pequeñas cosas que podemos hacer en cortos lapsos, que acumuladas esas buenas acciones traen sus recompensas y harán que te sientas a gusto y a la vez te incentives a seguir aplicándolas o a aplicar más aún.

Lo segundo sería plantearse metas, un poco más a largo plazo, puede ser un mes, también escribirlas e ir rumbo a ellas, también puede ser el tema del dinero o el tema en la pareja o conseguirla si es que aún no la tienes, puede ser hacerse más tiempos para estar con la familia, el auto que soñaste, etc.

Y luego la meta a largo plazo, si es tu pasión mejor, puede ser el tener tu propio negocio o tener la casa que soñaste, cuanto más grande sea mejor, ya que si lo alcanzas fácilmente deberás plantearte otro más grande, porque como dije en la publicación anterior, lo que nos mueve son los objetivos, nuestras metas, nuestros sueños y hay que ir a buscarlos porque para eso estamos vivos.

Te dejo un deber: deberás pensar sinceramente para qué estás aquí en esta vida, cual es tu misión, pero piénsalo bien, recuerda que aproximadamente a la edad de 80 años te vas a morir, así que olvídate del dinero y las riquezas materiales y piensa que sería lo mejor que puedes dejar en esta tierra, más allá de tus 80 o 90 años de edad.

Sin ganas de nada

21/03/2010

No tengo ganas de nada, siento que no tengo objetivos, no sé que hacer

Hace mucho tiempo comencé este blog con la firme idea de comenzar a buscar las herramientas para poder progresar e ir descartando diferentes opciones que autores ofrecen a gente que muchas veces están desesperadas por solucionar diferentes problemas que se presentan en sus vidas.

Últimamente he comprendido que todo converge en lo mismo, y que es mucho más potente nuestra capacidad de avanzar y hacer, más que esperar resultados del solo hecho de colocar una imagen en nuestra mente.

Yo de un principio aclaré que el blog iba a ir tomando su rumbo y hoy he decidido tomar las riendas y comenzar a darle forma a todo esto.

Solo se necesitan estrategias para poder avanzar, hacer las cosas necesarias, optimizar de alguna manera nuestras vidas para lograr avanzar.

Lo primero que tenemos que hacer es plantearnos lo que realmente queremos, esta respuesta nos puede llevar días, semanas, meses o años contestarla porque ¿de cuando el ser humano sabe lo que realmente quiere?

Primero debemos aprender a clasificar de alguna manera, las acciones que tomamos por nosotros mismos y las que tomamos porque otros nos las han incorporado desde nuestra infancia, padres, escuela, amigos, televisión lo que sea.

Generalmente en nuestra infancia se nos enseña que lo único que interesa es el dinero, que tenemos que vestirnos bien y un montón de cosas de las cuales luego vivimos pendientes e incómodos.

El ser humano no se mueve si no tiene objetivos, el día que sus objetivos se terminan solo se mueve por lo urgente, siente hambre y se da cuanta que tiene que comer y va a conseguir su comida, siente sueño y se acuesta a dormir, si se siente sucio se para y se va a bañar, su vida no tiene sentido y si se siente muy molesto, se auto-elimina.

Por el contrario, el que tiene objetivos tiene ganas de vivir y cuanto más objetivos tenga más son las ganas de vivir, también influye el o los objetivos en sí, si el objetivo es un sueño que siempre quisiste cumplir, más grande son las ganas de vivir.

Es por todo eso que debes encontrar tu verdadera pasión, organizarte, plantearte objetivos a corto y a largo plazo chicos y grandes respectivamente.

¿Cual es tu objetivo más grande?

Video "< La realidad es una ilusión >

17/01/2010

Recordemos que este video consta de dos partes, al terminar se mostrará la parte dos.

[Fuente: YouTube cacophony00]

Le pongo excusa a todo, ¿cómo hago para evitarlo?

02/01/2010

Hace mucho tiempo, leí un libro que se llama Sea el número 1, no recuerdo el autor, (quizás tu lo recuerdes y comentes) al libro lo presté y nunca me lo devolvieron, como suele pasar muy seguido.

El libro, obviamente, trata muchos temas, pero recuerdo uno que habla de una enfermedad, que poseemos casi todas las personas La Excusitis, ésta rara palabra el autor la utiliza para referirse a la mala costumbre (por llamarlo de alguna manera) que tenemos una gran mayoría de los seres humanos, de poner excusas antes de hacer determinadas cosas, como dije en la redacción anterior, “nuestra mente tiende a ser vaga” y quizás es el motivo principal de colocar una excusa antes de hacer cualquier actividad.

Algunas que se me vienen a la mente: “Soy demasiado viejo para…” “Soy demasiado joven para…” “Hoy hace demasiado frío…” “Yo nunca hice esto, no voy a poder lograrlo…” “Voy a esperar a que las condiciones sean las adecuadas…” y así puedo enumerar miles de Excusitis que la gente les vamos colocando a la vida en si, yo diría que hay tantas excusas como actividades por hacer en el mundo.

Si prestas verdadera atención y logras por un instante ser sincero contigo mismo, podrás darte cuenta de que son excusas y curarse de esta “enfermedad” no es fácil pero tampoco imposible.

Lo primero que vamos a hacer es.

  • Memoria, tienes que intentar recordar la mayor cantidad de casos a los que le has puesto una excusa de un tiempo a esta parte.
  • Atención, de ahora en más a estar atentos, recordemos que la excusitis, generalmente la aplica el subconsciente porque tiende a hacer “lo menos posible”**
  • Notar el cambio, a esto me refiero que una vez que detectes que estas a punto de poner una excusa, por ejemplo, –no, no voy a ir porque hace demasiado frío y no tengo que ponerme- la ignoras a esta excusa y buscas ropa y vas de todas maneras, te sorprenderá lo simple que era aquello que parecía un gran problema.

** El Método Silva trae un ejercicio de programación, que no tiene mucho misterio, esta herramienta podría servirte para indicarle a tu mente que “detecte” cuando estas a punto de poner una excusa innecesaria. Breve resumen del ejercicio:

Cuando te acuestas por la noche, ponte boca arriba en una posición cómoda, con las manos un tanto separados del cuerpo y los pies levemente separados entre si, comienzas a respirar hondo y cierras los ojos, para evitar pensamientos que comienzan a surgir recomiendo que sientan, oír los diferentes sonidos del ambiente, sentir primero los pies luego las manos y así con las partes que quieras, imaginarte en un lugar relajado, etcétera, todo esto ayudará a ahuyentar los pensamientos malos que saltan de un lado a otro, que las cuentas, lo que te dijo el vecino, la comida de mañana etc. 

Mientras sientes tienes que contar suavemente de 100 a 0, cuando llegas a cero alcanzas el nivel Alfa (enlace que lleva a Wikipedia como todos sabemos, una fuente segura), un estado de relajación muy placentero digno de experimentar, esto es como bajarle la velocidad al vehículo, los expertos aseguran que la mente, al “ir despacio” queda más “sensible” (cuando en un automóvil vas a alta velocidad, ves menos cosas que si lo haces despacio) pudiendo de esta manera, introducir en el subconsciente órdenes para que incluso durante la máxima actividad (nivel Beta), pueda aplicar dichas órdenes.

Una vez que estas en nivel Alfa, solo tienes que “introducir la orden” ya sea diciéndolo en voz alta o  imaginando que lo haces e incluso crear una situación similar, tienes que estar convencido de que lo estas logrando, y haciéndolo una sola vez, ya bastaría.

Todo esto es aplicable para lo que se te ocurra, pero para ilustrar mejor lo que veníamos hablando en esta redacción, pondré un ejemplo al respecto.

Una vez que estamos en Alfa imaginamos cualquier situación a la cual estamos a punto de ponerle una excusa e inmediatamente imaginamos que “nos damos cuenta” al mismo tiempo pensamos “Deseo darme cuenta fácilmente que estoy a punto de colocar una excusa” o mejor aún “Deseo no colocar excusas a actividades que son importantes en mi vida” y listo, en nivel Alfa es más que suficiente, decirlo pensarlo y sentirlo a la vez, siempre y cuando se respeten las tres leyes fundamentales.

Conocer nuestra mente para hacerla trabajar a nuestro favor.

26/12/2009
tags:

He leído por ahí, en algún libro, que nuestra mente, nuestro cerebro, tiende a ser vago, a minimizar para poder asimilar toda la información que entra por medio de los 5 sentidos, tacto, gusto, olfato, oído y vista, incluso gracias a esto se puede clasificar a las personas ya que tendemos a desarrollar una más que cualquier otra.

En psicología, se ha estudiado por varios años que la mente se divide en dos grandes partes (entre otras subdivisiones) lo consiente y lo subconsciente, donde ésta última abarca un mayor porcentaje que la primera y donde inmediatamente se saca la conclusión de nuestra “automatización” en la vida.

Por esto es que hay una gran diferencia entre lo que mostramos a la sociedad y lo que verdaderamente somos y también es cierto que no muchos aceptamos ésta realidad tan estudiada en psicología.

Muchas veces hemos oído a grandes maestros haber enseñado que si queremos cambiar nuestras vidas, tenemos que comenzar a conocernos y crecer interiormente, despreocuparnos por lo que sería el exterior y que al cambiar lo primero, esto último se soluciona solo.

Nuestra potente lógica, nos obliga a crear una incertidumbre a sucesos que muchas veces fueron causados por nuestro subconsciente y que muchas veces llamamos milagros o casualidades.

Existen miles de estímulos entrando cada segundo por tus cinco sentidos, pero nuestro cerebro no te puede “mostrar” todo eso a nivel consciente, así que solo está trabajando con lo que necesita en este preciso momento, que es la vista, pero esto no quiere decir que los otros sentidos no estén funcionando, porque a donde pongas tu atención notaras conscientemente lo que sucede, la computadora ¿Emite algún sonido en éste momento? ¿Qué otra cosa puedes oír? ¿Sientes que tienes los pies apoyados en el suelo? Minutos antes no lo notabas, porque necesitabas tu atención en la lectura y estabas concentrad@.

Pero es aquí donde nuestra mente comienza a “comprimir” la información que entra a él, para almacenarla, no vas a recordar cada palabra que mencioné en este texto, solo retendrás (a nivel consiente) lo necesario para recordarlo de aquí a un tiempo, pero si dentro de cuatro años un buen psicólogo te hipnotiza, puede que “te saque” hasta la última palabra que escribí o incluso que veas si tuve faltas o miles de imágenes que entran por el “rabillo del ojo”.

Lo bueno de todo esto es que existen muchas técnicas, al aceptar que nuestra mente trabaja en mayor porcentaje, subconscientemente, con unos pocos segundos al día podemos “darnos órdenes” para que lo guarde y actúe a nivel subconsciente lo cual va a resultar más fácil que hacerlo conscientemente.

Una vez que comprendamos nuestra manera de ser, basta por comenzar a ver sinceramente las pequeñas cosas de nuestro ser que queremos mejorar y que tenga un gran impacto en nuestra forma de vivir.

A no apresurarse y si quieres, podemos comenzar a “programarnos” juntos, poco a poco vamos a ir viendo cómo.